Saliendo a la superficie para evaluar el panorama
La eficacia militar de un submarino siempre ha dependido de su capacidad de permanecer sumergido y evitar ser detectado. Sorprendentemente, los primeros modelos navegaban a ciegas bajo el mar y hasta el siglo XX la única forma de observar su entorno era salir a la superficie, lo cual por supuesto revelaba su ubicación a otras embarcaciones.